Objetivos

La Historia es la rama del Conocimiento que estudia el pasado, y más específicamente el pasado de la Humanidad. Hay quien concibe la Historia como una disciplina más dentro de las llamadas Ciencias Humanas; otros prefieren destacar la Historia como una suma de saberes científicos.
En cualquier caso, hay mucha Historia por contar y muchas formas de hacerlo.
¿Puede concebirse una forma cristiana de hacer o contar la historia? ¿Qué entenderíamos por ello? Parece una pregunta absurda: no hay una forma específicamente cristiana de hacer historia, como no la hay de ser dentista o de poner ladrillos o de sembrar patatas; o quizá no es tan absurdo, quizá la única forma realmente cristiana de hacer las cosas consiste sencillamente en hacerlas lo mejor posible en la línea, fundamental, de la santificación del trabajo. La lengua coloquial nos da algunas pistas: hablar en cristiano es hablar llanamente, para que todos nos entiendan. De hecho, Juan Pablo II llegó a decir literalmente que "hay un modo cristiano de ser atleta y un modo cristiano de ser hombres".

¿Qué entenderíamos por "hacer un programa de Historia" en una radio como Radio María? Desde su fundación en una parroquia del norte de Italia, Radio María se ha caracterizado por su total apoliticidad -la Virgen María no está afiliada a ningún partido- y por su absoluto desinterés por el negocio publicitario. Radio María se mantiene con los donativos de sus fieles.
Muchos de nuestros oyentes se acercaron por primera vez a Radio María por esos motivos: no soportaban ya la saturación publicitaria ni la politización de tantos programas de la radio comercial. Luego han seguido "enganchados" a esta emisora porque responde a sus necesidades espirituales, y les acompaña en algún momento del día; no debe ser tan mala compañía si tenemos en cuenta que pasamos del millón de oyentes.
Esa forma de hacer las cosas tiene que reflejarse también en nuestro programa: si hablamos de un libro o de una película no es para ayudar a su venta y extraer de ello un beneficio sino porque creemos que al público le puede informar, enseñar o entretener; para destacar un aspecto que nos parece original, ejemplar o interesante. Si traemos al programa a un político no es para ayudarle a sacar votos sino porque tiene cosas interesantes que contarnos o un testimonio que ofrecer.
Por otra parte la Historia, como rama del conocimiento, aspira a la veracidad. Pueden ser muchas las interpretaciones, pero los hechos no son discutibles, por difícil que sea determinarlos. Si algo caracteriza el mensaje cristiano, es su apuesta por la verdad y su talante optimista: el cristianismo propone la Salvación y por lo tanto no puede obsesionarse con lo negativo. Evangelio significa "Buena nueva".
Resumiendo estas breves consideraciones, nos proponemos varios objetivos:
  • Desterrar el aburrimiento y la pedantería. Para llegar a muchos, entreteniéndolos.
  • Llegar a un nuevo público, la comunidad universitaria y el mundo de la cultura, ofreciéndole un medio para expresar su verdad y sus trabajos.
  • Destacar lo que une, y no lo que separa, y más en estos tiempos de crisis en que los sembradores de odio aprovechan el miedo de la sociedad y el desconcierto de los pueblos.
  • Contar historias en positivo y desde una perspectiva humana: siempre hablaremos más de las víctimas que de sus verdugos; si mencionamos una guerra o un conflicto siempre será para destacar los valores humanos de alguna persona en concreto y no de la guerra en sí misma.
  • Tratar de sonreír: decía la santa de Calcuta: la Paz empieza con una sonrisa.